SANTO DOMINGO. Horas antes de que se cantara ¡Play ball!, el domingo en Chicago, y se abriera el telón, los peloteros dominicanos ya habían logrado la primera hazaña de la temporada 2015 en el renglón que compensa la suma de talento y trabajo. Por vez primera, los toleteros criollos superaron el umbral de los US$400 millones en salarios garantizados al inicio del curso, 15 años después de alcanzar la simbólica marca de los US$100 millones.
La cifra total a cobrar esta vez será de US$423,014,186 (antes de impuestos, que se llevan más del 45%), un aumento bruto de US$26,359,207, con relación a los US$396,624,979 que aseguraron al inicio de la campaña 2014. Este monto supera con creces lo que el Estado proyecta percibir en 2015 por las exportaciones de la Barrick Gold (US$382.2 millones).
Al cambio oficial del dólar ayer (RD$44.40) el monto totaliza RD$18,781,829,858, cantidad superior a los impuestos que cobró el Gobierno en 2014 a las bebidas alcohólicas (RD$18,300 millones).
Serán 84 los jugadores con contratos garantizados, incluyendo a Ervin Santana (que se perderá los primeros 80 partidos por arrojar positivo a una prueba de dopaje), Iván Nova, Lisalberto Bonilla y Alexander Colomé, estos tres últimos lesionados. La amonestación le costará a Santana US$5.9 millones.
Los desembolsos pueden subir en caso de que jugadores en cuyos contratos se incluyen incentivos por rendimientos, distinciones o premios, activen con su desempeño esas cláusulas.
Es un aumento considerable, si se toma en cuenta que hace 25 años, cuando arrancó la campaña 1990 los 57 dominicanos que aparecieron en las plantillas tenían asegurados US$26.2 millones, una cifra cercana a los US$24 millones, que tanto Albert Pujols como Robinson Canó cobrarán este año.
Otros quisqueyanos a quienes se girarán cheques sobre los US$20 millones serán Alex Rodríguez (US$22 millones) y José Reyes (US$22 millones).
El grupo de los que superan las decenas también incluye a Hanley Ramírez (US$19.7 millones), Adrian Beltré (US$16 millones), Jhonny Peralta (US$15 millones), Nelson Cruz (US$14.2 millones), José Bautista (US$14 millones), Aramis Ramírez (US$14 millones), Melky Cabrera (US$13 millones), Ubaldo Jiménez (US$11.9 millones), Francisco Liriano (US$11.6 millones), Bartolo Colón (US$11 millones), Edwin Encarnación (US$10 millones), y Johnny Cueto (US$10 millones).
Hanley, Reyes, Aramis y Liriano serán los jugadores mejor pagados de sus equipos, mientras que Pujols y Canó los segundos en sus organizaciones.
Si bien la media salarial de los criollos alcanzará los US$5 millones (casi US$800 mil más que el promedio a las Grandes Ligas) hay 31 integrantes del pelotón criollo, cuyos ingresos en 2015 se quedará en seis dígitos.
El monto total a cobrar por los duartianos podrá incrementarse en la medida en que suban jugadores desde las ligas menores, y en que varios agentes libres puedan firmar, como Rafael Soriano y Wandy Rodríguez.
En 2014, los 29 debutantes durante el transcurso de la estación capturaron US$4 millones.
Los “humildes”
No estaba en el libreto que Miguel Castro quedara en el equipo de Toronto, pero este derecho romanense de 20 años se ganó el puesto en los entrenamientos y, si bien no se bañará en dólares como sus compañeros dominicanos de los Blue Jays, verá un cambio drástico en sus cuentas bancarias.
Firmado en 2012 por US$43 mil, Castro nunca lanzó más allá de doble A, una liga en la que se paga US$1,700 al mes. De acuerdo con su biografía, el bono de firma tuvo que invertirlo en una operación de próstata de su padre (un ex boxeador) y una cirugía para remover un tumor fibroma a su madre, según su biografía en Wikipedia.
Castro tiene garantizado un contrato de US$507,500, el mínimo que se pagará a los jugadores de un primer año en el Big Show. En ese rango también estará Héctor Gómez y Frank Garcés, mientras que los de segundo año como Rafael Ynoa, Arismendy Alcántara y José “Jumbo” Díaz rondarán los US$510 mil.
Firmado en 2012 por US$43 mil, Castro nunca lanzó más allá de doble A, una liga en la que se paga US$1,700 al mes. De acuerdo con su biografía, el bono de firma tuvo que invertirlo en una operación de próstata de su padre (un ex boxeador) y una cirugía para remover un tumor fibroma a su madre, según su biografía en Wikipedia.
Castro tiene garantizado un contrato de US$507,500, el mínimo que se pagará a los jugadores de un primer año en el Big Show. En ese rango también estará Héctor Gómez y Frank Garcés, mientras que los de segundo año como Rafael Ynoa, Arismendy Alcántara y José “Jumbo” Díaz rondarán los US$510 mil.
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